PRECISIONES
Recientemente, en el blog de la Presidencia, el Secretario Técnico del Consejo de Seguridad Nacional, Alejandro Poiré, señaló con vehemencia que era culpa de las administraciones anteriores la situación de violencia e inseguridad que cunde en el país, por la inacción y tolerancia al crimen y por haber permitido el crecimiento y diversificación de delitos, como secuestro, extorsión y robo, hasta generar el debilitamiento de las instituciones. También tuvo a bien agregar que los mexicanos han sido testigos de las graves consecuencias que derivan de soluciones falsas como pactar o no enfrentar el crimen. Tan falsas como jugar a Elliot Ness y los Intocables o rodear al Secretario de Gobernación de Soldados mientras este desde un templete reta al hampa y fanfarronea: ¡LOS ESTAMOS ESPERANDO! (¡Para eso nos gustaban! ¡Arránquense que pa´ todos hay! ¿Ustedes y cuántos más?).
¡Sólido y conciso! ¿No?
En un artículo que se tituló “El cuarto mito: la solución a la violencia está en pactar con los criminales”, el Sr. Poiré determinó que acordar con delincuentes sólo hace florecer la impunidad y no garantiza el fin de la violencia, sino que otorga licencia a narcotraficantes, secuestradores, extorsionadores, ladrones y traficantes de personas, generando un daño social...
¿De modo que el fin de la violencia se obtendrá mediante confrontaciones cotidianas entre el hampa y las mermadas (y coludidas) fuerzas gubernamentales, con fuegos cruzados y balas perdidas, con imposibilidad de interacción social, con terror, con falta de normalidad, con muertes y daños colaterales? Eso ha resultado un firme y certero pasó para evitar el daño social: LA SANGRE.
Poiré señaló que el único pacto que debe existir es el de la sociedad y su gobierno (Un pacto que ya existe y se llama “CONSTITUCIÓN” ¿Lo conoce Sr. Poire?) y recalcó que la reducción de la incidencia delictiva en localidades como Tijuana no se logró permitiendo a algunos delinquir mientras se castigaba a otros. En efecto, eso debe ser reconocido. Se logró haciendo que la población se encierre despavorida en sus casas y nadie salga más que para lo indispensable.
¡ESO ES GOBERNAR CARAMBA!
Por otra parte el Secretario Técnico precisó que lo anterior “se ha conseguido combatiendo frontalmente la actividad criminal de manera coordinada y corresponsable (Significa: con la irresponsabilidad e impunidad que confiere el orden vigente), al tiempo que se renuevan las corporaciones policiales y se reconstruye el tejido social”. Si claro, quiere decir que surge un nuevo Modus Vivendi: LA POBREZA APLASTANTE, en eso reside la reconstrucción (con láminas y cartones) del tejido social; En su desaparición…
Luminoso Futuro…
Errare Humanum Est.
SEBASTIÁN L. GONZÁLEZ DE COSÍO
PRESIDENTE DEL COMITÉ DIRECTIVO
DEL DISTRITO FEDERAL
