Qué puede decir uno los viernes, o, mejor dicho, qué quiere leer la gente los viernes. Hagamos una disección un tanto realista: los viernes uno piensa en la salida del trabajo, en lo que hará en la noche, en lo que será el fin de semana. Los viernes tienen la magia de convertirse en sábado y luego en domingo, entonces, ¿qué leer para empezar el fin de semana?
La pregunta no es en vano. Me he pensado qué escribir: tomar la nota de la semana, hacer un exhorto a la bandera (el día de ayer, jueves 24 de febrero, fue día de la bandera), recapitular la toma de protesta protocolaria del Comité Directivo de Movimiento Juvenil Mexicano en el DF, quejarme de las condiciones infrahumanas que viven las mujeres y los hombres de la Ciudad de México en medio del tráfico y las prisas, acusar el problema del narcotráfico y el crimen organizado, hablar de normas, de instituciones, de conceptos políticos, recomendar un libro o un autor o una película o algo. El espacio da de sobra.
Viernes, día de Venus, la diosa del amor entre los romanos. Viernes que empieza con un cierto sabor de tequila, de whisky, de cerveza. Viernes entonces: un abrazo fuerte a todos los miembros del Comité Ejecutivo del DF de Movimiento Juvenil Mexicano y un abrazo a su Presidente y mi amigo Sebastián que hizo de la toma de protesta un evento de verdad relevante y a toda la gente que se sumó a un proyecto que dará mucho de que hablar y que hará un esfuerzo grande, grandísimo, por lograr que la Ciudad de México, sea, aún, “más mejor”, como diría Panchito.
Mucho que hacer, muchas manos dispuestas. Nuestro esfuerzo y el compromiso firme con nuestra ciudad, con nuestros amigos, con los que suman para hacer un cambio cada día, con los que hacen que los semáforos tengan un sentido y las líneas de cebra sirvan, realmente, a los peatones. Pero ya es viernes y después de la mañana, las libaciones pertinentes a Baco y una tardecita suave, la Ciudad es amable por las tardes y más vale evitar los engaños del tráfico. Aquí les dejo:
Un libro y un autor: 1Q84 de Murakami publicado por Tusquets.
Una película: El peleador, para los amantes del box, una gran historia; para los amantes del cine, una gran película.
Una bebida: si hace calor, un martini de pepino, en algún lugar de Polanco o Condesa o una cerveza muy fría. La tarde lo comprenderá.
KRHISTO GONZÁLEZ MUÑOZ
SECRETARIO GENERAL
